Presentamos el proyecto Imprifácil, una iniciativa que proviene de una pequeña Start-up afincada en Alicante, y cuyo objetivo es renovar y hacer accesible a las nuevas tecnologías el sector de las copisterías e imprentas de todo el país. Un ejemplo de cómo las nuevas tecnologías pueden impulsar el comercio local y a la vez facilitar la vida tanto a comerciantes como a usuarios. En la siguiente entrevista, Alberto Fernández nos cuenta un poco más sobre este proyecto y cuales son sus objetivos a largo plazo.
R: Sin duda alguna el emprender en cualquier tipo de negocio supone un desarrollo profesional alto. Al estar continuamente en contacto con los mercados, continuamente desarrollando tu producto, así como atendiendo a las necesidades de los clientes, etc. supone un aumento enorme de nuestra capacidad práctica para resolver problemas, lo que a la larga nos convierte en mejores profesionales. Sin embargo hay que tener en cuenta que para emprender hacen falta recursos y sacrificio personal, por lo que recomiendo sopesar siempre los pros y los contras antes de decidirse.
P: ¿Qué es Imprifácil y de dónde surge este proyecto empresarial?
R: Imprifácil es una plataforma online que permite a los usuarios encargar impresiones de documentos sin moverse de casa para más tarde pasar a recogerlos en su copistería más cercana. Este proyecto nace con la intención de solucionar un problema que casi todos hemos tenido alguna vez cuando hemos querido imprimir algo en alguna copistería. Normalmente nos acercamos al sitio, preguntamos si podemos enviar los archivos por email, o dejar un pendrive, y aquí es donde empiezan los problemas: los archivos no son compatibles, los emails no llegan, virus en los pendrives, etc., sin contar el hecho de que tenemos que desplazarnos a la copistería y que tampoco conocemos cuánto nos va a costar.
Imprifácil soluciona estos problemas: pone a disposición de los usuarios una interfaz clara y sencilla para subir ficheros y apuntes, seleccionar la copistería donde quiere encargarlos y pagar online, en todo momento sabiendo cuánto le va a costar. Además, ayuda a las copisterías a captar más usuarios a través de Internet, y a ahorrarse tiempo en atender físicamente a los mismos. De esta manera ambas partes se benefician y pueden llevar a cabo esta transacción de servicios de manera más óptima y eficiente.
P: ¿Quienes integran el equipo emprendedor que hacen posible este proyecto?
R: Imprifácil tiene estructura emprendedora de Start-up. Actualmente somos 2 personas encargadas de llevar a cabo este proyecto: por un lado yo, que me dedico a toda la parte técnica (programación, infraestructura, etc.) y por otro lado Cristina Ponce, que fue alumna de SocialOVTT y hoy se encarga del diseño artístico y la marca comercial, así como de la campaña de marketing para dar a conocer el producto tanto a usuarios como a copisterías. Imprifácil tiene estructura emprendedora de Start-up, por lo que, a pesar de ser un equipo pequeño, ambos nos dedicamos por igual a tareas dispares que muchas veces no tienen nada que ver con nuestra especialización concreta.
P: ¿De dónde surge la necesidad de emprender e innovar en este sector?
R: Aparte de las razones mencionadas en la introducción, me gustaría aprovechar para dar un enfoque más profundo a esta cuestión y que tiene relación con el desarrollo y los objetivos de Imprifácil. Es evidente que Internet está cambiando la manera en la que las personas hacen negocios unas entre otras; esto podemos verlo día a día. Sin embargo, hay todavía sectores que se resisten al cambio, y que por lo general son reacios a adoptar estas nuevas tecnologías. Sin embargo, es verdaderamente importante que iniciativas como la nuestra intenten innovar y hacer accesible estas tecnologías a dichos sectores comerciales. Esto cobra importancia crucial si tenemos en cuenta el hecho de que Internet y las nuevas tecnologías cada vez son más relevantes (vosotros del OVTT lo sabéis muy bien): hay muchos ejemplos de industrias que no han sabido adaptarse a esta situación, sólo para sufrir cambios drásticos y en ocasiones la desaparición por completo.
Por ello pensamos que iniciativas como esta son importantes ya que facilitan esta adaptación a las nuevas tecnologías, apostando por una integración sencilla y poco dolorosa para el sector y las personas que lo conforman.
P: ¿Qué tendencias de la red os están resultando útiles para vuestro proyecto?
R: Creemos en la innovación en todos los sentidos, y como tendencias tecnológicas útiles estamos adoptando en la medida de lo posible iniciativas como, por ejemplo, el pago online a través de Bitcoins, la moneda digital, que ya tenemos integrada en Imprifácil. Nuestro proceso creativo y productivo se beneficia además de esta visión, ya que nos permite llevar a cabo más tareas y adaptarnos continuamente a las necesidades del mercado en donde pretendemos asentarnos.
P: ¿Cuáles son los principales objetivos para lograr esta integración?
R: El principal objetivo de Imprifácil es llevar a cabo esta integración de la manera más fácil posible. Por ello hemos tenido especial cuidado a la hora de diseñar la plataforma, a todos los niveles, funcionalidad, usabilidad y experiencia de usuario. Así por ejemplo, las copisterías son capaces de gestionar todos los pedidos utilizando única y exclusivamente una dirección de correo electrónico. A partir de aquí, y a medida que el usuario se vaya sintiendo cómodo con el uso de esta tecnología, se pueden ir añadiendo elementos más complejos que se complementen los unos a los otros, y que ponen a su disposición herramientas útiles con las que atraer a más usuarios y en última instancia más repercusión económica.
P: ¿En qué fase se encuentra actualmente Imprifácil?
R: Actualmente nos encontramos “luchando” en 2 frentes distintos: por un lado los usuarios y por otro las copisterías. En cuanto a los usuarios, resulta más fácil atraerlos a la plataforma, y hemos notado que hay demanda de un producto de esta características. Nuestro cliente principal es el estudiante, que por lo general está bien habituado al uso de las nuevas tecnologías y recibe con los brazos abiertos iniciativas como esta.
Las copisterías sin embargo, como he comentado anteriormente, suponen un verdadero reto, y por eso son nuestro objetivo más importante. Hemos notado que buena parte de las copisterías son reacias, por razones índole tecnológica, a formar parte de la plataforma (que, por cierto, no tiene ningún coste para ellas). Sin embargo, también hemos advertido que otra parte se muestra receptiva y con ganas de formar parte de un proyecto así.
P: Para finalizar, ¿qué tenéis en mente de cara al futuro, qué retos tenéis pensado abarcar?
R: Nuestro reto principal es hacer accesible Imprifácil a todas las copisterías del país. Sabemos que esto es una empresa complicada y que vamos a tardar tiempo en conseguirlo, pero también sabemos que Imprifácil es un buen producto que aporta valor a todas las partes y que tenemos los recursos y el potencial para poder llevar a cabo algo así. De momento hemos empezado con Alicante y la cosa está funcionando bastante bien: tenemos ya más de 20 copisterías adheridas a la plataforma y seguimos trabajando día a día para dar a conocer el producto a la mayor cantidad de usuarios posible.
Por supuesto, otro de nuestros retos es hacer que Imprifácil se convierta en un referente a nivel de usuarios, que allá donde haya un usuario que necesite imprimir algo, Imprifácil esté ahí para llevar a cabo esa tarea, y que de manera inmediata el usuario relacione nuestro producto con impresión de documentos. Algo así no es fácil, pero estamos seguros de que podemos trabajar para hacer algo así realidad.
P: ¿Recomendáis apostar por el emprendimiento como oportunidad de desarrollo profesional a otros estudiantes?
R: Sin duda alguna el emprender en cualquier tipo de negocio supone un desarrollo profesional alto. Al estar continuamente en contacto con los mercados, continuamente desarrollando tu producto, así como atendiendo a las necesidades de los clientes, etc. supone un aumento enorme de nuestra capacidad práctica para resolver problemas, lo que a la larga nos convierte en mejores profesionales. Sin embargo hay que tener en cuenta que para emprender hacen falta recursos y sacrificio personal, por lo que recomiendo sopesar siempre los pros y los contras antes de decidirse.